lunes, 25 de julio de 2011

25:7.





mi garganta bebe silencio.
recupero una sonrisa
prohibiendo mi venta.
me laten las entrañas,
y la luz se escapa por 
mi ombligo de pan,
sin dientes que lo 
hagan migas.
mi epidermis es reversible
con olor a verano fisurado,
descubriendo las trapas
de caricias de lengua.
¿donde se esconde el truco 
para no extrañar la debilidad?
tiendo una alfombra de terciopelo
para sudar mi desnudez en espiral,
y fluir sucia y deliciosa y fácil.







M.

4 comentarios:

  1. comentario cursi que vas a odiar:
    la debilidad, que no se esconda.
    ese es un truco que solamente nos ahoga...

    (perdon jajaa si, el premio a la berretada del mes, ok, pero lo siento de verdad!)

    besos, querida M.

    L, querida ;)

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  2. Este poema es magnífico.
    Voy a leer más por tu blog.

    Saludos.

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  3. Una epidermis reversible que suda su desnudez en espiral,y fluye sucia y deliciosa y fácil, es una piel que respira caida....(dolor y placer a veces es lo mismo)

    mi beso

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  4. Me quedo en tu blog... con el placer predispuesto.
    Teniendo la seguridad de que estaré entre la frescura y la espontaneidad más rutilante.
    Cuando necesite el contacto con la dulzura y con los adjetivos mejor hilvanados... vendré a verte.
    Tu forma de escribir me ha parecido maravillosa.
    Gracias por permitirme conocerte.
    Un saludo.

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